Recorrer tus paisajes
¿De qué sirve intentar conocernos? ¿de qué sirve observarnos? ¿de qué sirve compartirnos?
20.01.25 - 12:10am, en realidad sigue siendo 19 de enero en mi cabeza
Ya hace unos años que ando obsesionada con los paisajes. Paisajes, que creía “naturales”. Resulta que un paisaje de natural no tiene nada, pues la naturaleza del paisaje es en esencia humana. No existe un paisaje sin un sujeto que lo observe. La naturaleza, sin nuestra mirada subjetiva, es ella misma, pero no es un “paisaje”. Ella solo es. Nosotros cargamos de significado y sentir aquello que observamos, nosotros nos asombramos por la belleza sublime de una cadena montañosa, o de un desierto infinito. Nosotros le otorgamos la carga estética y emotiva a lo que observamos.
He estado leyendo, así es. “El paisaje peruano” de Jean Pierre Crousse, inicia explicando conceptos básicos sobre paisajes. ¿Yo? chocha. Feliz. Hace ya un tiempo que estaba necesitando una lectura que me llene de nuevos conceptos, pero no de negocios ni de creatividad. Esta es una lectura que como artista me ayuda a tener una base sólida desde la cual le puedo dar sentido a mi cuerpo de trabajo. Le da nuevas perspectivas y nuevos significados a las obsesiones que he estado atendiendo y desarrollando por mera intuición y curiosidad.
Algo que me encantó de esta lectura es que el autor, para entender y crear una definición de “paisaje peruano” tuvo que recorrerlo, experimentarlo, sentirlo, en primera persona. Esto, porque no existía suficiente bibliografía ni trabajos realizados sobre el tema. Una limitante se vuelve, una vez más, bendición.
La metodología que utilizó para recolectar información la llamó “La experiencia del recorrido”, donde “se conoce el paisaje directamente mediante la experiencia de traslación y observación sensible”
Traslación y observación sensible. Es decir, caminar y observar con sensibilidad, conectado con tu sentir, estar atento a lo que sucede adentro al observar el paisaje.
Me recordó a la fotografía y a la escritura, me recordó a todo lo que soy.
Justo estos días había estado pensando en el propósito de lo que escribo. Y en general, me imagino que es una cuestión que nos asalta a muchos creativos, escritores y artistas, o a quienes escribimos diarios todos los días: ¿de qué sirve escribir/crear sobre mis experiencias? Crousse lo explicó mejor que yo:
“Se recorre el paisaje para llenarlo de significado”
Conocer el paisaje directamente, recorrerlo, para conocerlo. Nos experimentamos, nos observamos y nos describimos para entendernos. Recorremos nuestros paisajes, para llenarlos de significado. Para darles sentido. Observamos mientras damos pequeños pasos, escribimos nuestros hallazgos y los compartimos. ¿Para qué? Para darnos sentido. Y eso no me parece una misión ligera ni poco importante. ¿No es el “sentido” lo que todos buscamos? ¿El “sentido de la vida”?
Es lo que he intentado transmitir con este proyecto: somos poetas viajeros cuando nos conocemos a través de la autoobservación sensible mientras recorremos la vida, mientras viajamos, por dentro y por fuera. Viajes externos que mueven los caminos internos. Viajes internos que transforman o crean nuevos caminos externos. Observar nuestros paisajes mientras caminamos, y así, llenar de significado nuestra vida, darle sentido a nuestra existencia.
Me preguntaba mientras caminaba, antes de sentarme a escribirte, si el “propósito” se encuentra o se crea. Creo que se puede encontrar mientras viajamos por la vida, como un hallazgo, una conclusión, un grito de “eureka” tras entenderte. O lo creamos, después de múltiples experimentos, observaciones y ponderaciones, llegando a la conclusión de que a partir de ese momento, aquel será tu propósito.
Personalmente no suelo pensar en mi “propósito”, solo ando caminando siguiendo lo que mi curiosidad e intuición me dictan. En el camino he ido encontrando el sentido. ¿Cómo sé que lo he encontrado? Se siente, lo sientes. Se siente ligero, todo cobra sentido: quien eres, tus inclinaciones, tus opiniones, tus curiosidades y tus decisiones, todo cobra sentido. Te entiendes. Y eso te solidifica, ya sea como persona o como artista. Entender tus obsesiones, tus curiosidades, genera identidad y te abre puertas desde las cuales, más segura que antes, le aportas a la vida. Le devuelves lo que te ha dado, desde tu autenticidad, con gratitud.
Nos vemos en la ruta,
- poetaviajera.
Bitácora de Viaje
jeje y por eso también llamé así a este substack: anotaciones sobre los paisajes que voy observando. Hoy no les compartí paisajes que he fotografiado, pero en otras cartas se los seguiré enviando.🌞 ¿Ustedes cómo van? ¿qué paisajes han estado observando?
Qué bonita tu visión ♥️✨ Caminante no hay camino, se ha hace camino al andar...
Últimamente he estado admirando y apreciando paisajes nevados que me recuerdan la importancia de honrar la belleza del invierno tanto en la naturaleza como en mis propios procesos ❄🥰
Me encanto tu carta tocaya! Gracias por compartirnos tu pensas y sentir 🤍